Para 2015 se ha pronosticado un aumento muy notable en materia de ciberespionaje, una actividad que “persigue el robo de la propiedad intelectual y la obtención de una información privilegiada que se pueda vender en el mercado”, según ha explicado a EFEfuturo el director regional de Intel Security, Javier Perea.
Vulnerabilidad es ‘cara b’ del avance tecnológico
Además, explica que los actores del ciberdelito “intentan siempre sacar partido a la revolución tecnológica, en la que la vulnerabilidad se ha convertido en su cara b”Entre los métodos más recientes para obtener beneficios de la vulnerabilidad de datos, en España “se está dando una oleada de ‘ransomware‘ o software de secuestro“, que cifra los ficheros de un dispositivo para exigir al usuario un rescate abonado con ‘bitcoins’ para que sea “imposible rastrear al delincuente“.
Móviles y tabletas, el objetivo de ciberdelitos
Durante 2015 los móviles y tabletas serán el objetivo clave de esta práctica porque “almacenan valiosas imágenes y datos personales, unos datos muy apetecibles para chantajear“, señala el informe.Los móviles también tendrán que hacer frente a otra clase de vulnerabilidad derivada de la extensión de pago digital con tecnología NFC, y aunque esa tecnología “suponga el final de los clonadores de tarjetas de crédito” esta clase de transacciones funciona con una tecnología inalámbrica que a los ciberladrones le resultará más fácil de boicotear.
Otro aspecto a destacar sobre las ciberamenazas previstas para 2015 son las que afectan al Internet de las cosas, ya que “cada vez son más los ataques a los dispositivos conectados, debido a las pésimas prácticas de seguridad y el alto valor de los datos almacenados en estos dispositivos”, destaca el informe.
El director general de Intel Security ha afirmado que en este aspecto se ha detectado un tipo de amenaza alarmante, como es el uso de los dispositivos digitales sanitarios en hospitales, en los cuales se hace es más probable “el robo de la información almacenada en ellos” ya que los datos médicos son “más valiosos que los de una tarjeta de crédito“.
Por otra parte, ha destacado el auge de las ciberguerras puesto que “el mundo ciber es un reflejo del mundo real, y por eso un conflicto político siempre tendrá un componente cibernético”.
Regular e incrementar las sanciones
Para Perea, entre las soluciones a los futuros ciberdelitos destacan una mayor regulación e incremento de las sanciones, con la “necesaria armonización entre países, para que todo sea delito en todos los países y los delincuentes no se aprovechen de los vacíos legales”.Los fabricantes también deben de incluir la seguridad en los diseños, no reaccionar solo cuando surja el problema, aunque eso encarezca los costes; algo que harán solo con presión ya sea gubernamental o de los consumidores, según ha indicado Perea.
“La industria es capaz de proporcionar soluciones para detectar las amenazas antes de que ocurran y que así las empresas puedan contar con herramientas para luchar contra estos delitos“, añade.Además, todavía hay una concienciación escasa de los riesgos que implica el mundo cibernético, por lo que es esencial “educar a los usuarios, que son el eslabón más débil, yo diría que “cuando haga algo se pregunte si lo haría lo mismo en el mundo real“.
F.EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario